Sonia Gamboa Vázquez, la primera estudiante mexicana en la NASA.

Sonia Gamboa Vázquez, la primera estudiante mexicana en la NASA.

Sonia es alumna de Ingeniería Industrial en la Universidad Veracruzana, primera estudiante mexicana en desarrollar investigación científico-espacial en la National Aeronautics and Space Administration (NASA), como resultado de la vinculación entre ese organismo estadounidense y la Agencia Espacial Mexicana (AEM).

Mi interés por el espacio surgió en la universidad 

El interés por conocer el espacio surgió de un viaje de prácticas donde visitó algunas empresas y pasó por el Space Center de la NASA, se interesó, por ejemplo en que la estación espacial internacional da vueltas alrededor del mundo todo el tiempo investigando el espacio.

¿Que se aprende en la NASA?

Tenía 21 años cuando tuve la oportunidad de participar en el estudio de la NASA.
El proyecto donde yo estaba era reciclaje de agua a través de ósmosis directa, fue un proyecto que tenían de reciclaje de agua en la estación espacial internacional.
Investigar todo ese tipo de cosas me ayudó mucho a crecer en mi carrera pero personalmente también me ayudó convivir con gente no solo de Estados Unidos sino que ahí dentro en la NASA hay personas de muchas nacionalidades y eso también es muy enriquecedor, compartir con gente de tantas culturas.

Donde yo estaba mi supervisora directa era española y otro de los supervisores que tenían era italiano y el jefe del proyecto era de Estados Unidos, entonces me tocó convivir con gente de muchísimas partes del mundo y  de diferentes códigos educacionales.

¿Qué piensas de que cada vez más vemos a las mujeres en diferentes espacios?

Estaba un poco acostumbrada a que siempre hubiera más hombres que mujeres donde yo estaba, es muy recurrente en ingeniería. De los doce estudiantes, solo dos éramos mujeres, estaba medio acostumbrada a ser minoría pero el ambiente dentro de la NASA es muy inclusivo, había varias mujeres trabajando en diferentes proyectos muy interesantes y eso me gustó mucho, sentí que allá dentro no había tanta diferencia si eres hombre o mujer o de cualquier parte del mundo donde vinieras.

En algún momento si he tenido que enfrentarme a algunos prejuicios, todavía hay quién piensa que si eres mujer no lo vas a hacer tan bien como si fueras hombre, pero he tenido que luchar para romper esos estereotipos y que no asuman que por ser mujer vas a hacer un trabajo menos eficiente o que vas a ser menos profesional que un hombre.

Al platicar con Sonia sobre la situación en México donde hay muchas niñas interesadas en la ciencia, pero muchos obstáculos que pueden encontrar en la universidad tanto económicos sociales, culturales; ella nos comenta a lo que se enfrentó en su entorno familiar.

En mi caso siempre tuve el apoyo de mis papás para estudiar lo que yo quería, pero cuando crecí, confieso que me entró un poco de inseguridad al decir, no voy a poder con eso.

Al final me decidí pero siento que faltan modelos a seguir con los que nos podamos identificar para no sentir esta duda de que tal vez no podamos estudiar alguna carrera como ingeniería. Siento que deberíamos poder identificarnos con más mujeres que hagan eso para no dudar en algún momento que nosotras podemos.

Seguramente lo que tú aprendiste es importante retransmitirlo sobre todo a niñas y adolescentes, ¿Qué piensas de ser el ejemplo para impulsarlas y que no tengan miedo?

Exactamente eso, quiero compartir los conocimientos y la experiencia que tuve en el exterior y poder inspirar que otras niñas y niños se sientan, y vean las posibilidades que hay, que abran un poco más su panorama y también se interesen en estos temas.

Creo que también es muy importante volver a casa y apoyar a la comunidad, está bien ir al extranjero y aprender, pero al regresar debemos tener como un poder desarrollarlo y aplicar lo aprendido.

¿Qué te hace sentir orgullosa?

Haber tenido oportunidad de ser seleccionada, fue una gran experiencia poder estar en la NASA, me enorgullece haber tenido los requisitos para ser la elegida, no fue sencillo pero si me enorgullece haber aprovechado esta experiencia.

Yo creo que sería un buen inicio de poder ir a las escuelas y compartir mi experiencia con los niños que todavía no saben muy bien qué es lo que quieren hacer o estudiar cuando sean mayores, creo que si sería buena idea poder hablar con ellos y compartirles lo que hice allá para que ellos en un futuro busquen alguna oportunidad similar y no se pierdan el interés por estudiar alguna carrera de ingeniería.

¿Qué les dice Sonia a todas las niñas inteligentes como ella?

Para todas las niñas que están dudando si pueden estudiar alguna ingeniería o ciencias, deberían seguirlo, nunca dejen que las dudas hagan cambiar de decisión.

El apoyo de los padres es muy importante, pero en algunos casos los mismos padres te dicen que no deberías estudiar eso porque es de hombres. Aunque haya gente que les diga que no es lo tradicional, recuerden que no hay un modelo de lo que debería estudiar una niña, nunca duden de ustedes como a mí me paso en algún momento.

Cuando sientan que no son lo suficientemente capaces, deben seguir… tengan por seguro que son capaces de todo lo que se propongan y trabajen por ello.

Deja un comentario