Está claro que México ha aportado al mundo muchas cosas de las que el planeta entero no podría prescindir, empezando por sus ricos alimentos. Con gran esfuerzo y paso firme nos hemos mantenido entre los primeros 15 países exportadores del mundo.
De nuestra cultura, creatividad y diversa naturaleza han emergido muchos productos que han enriquecido a toda la humanidad. De lo que más se conoce es la tortilla de maíz, el cacao o los mariachis, pero hay mucho más, empezando por los descubrimientos de los mayas, quienes desarrollaron el cero como marcador de posición en torno al año 350 A.C. En aquel entonces, lo usaron como marcador de posición en sus sistemas de calendario.
Ahora el cero, tan importante para los cálculos, es la base del lenguaje computacional. El aporte al fútbol no lo podemos olvidar. Empezó con el Tlachtli, la competencia deportiva que tenía el Imperio Azteca desde 3000 a.C., la cual consideraban sagrada.
La educación universal también se considera un aporte de la cultura azteca que continúa en nuestros días. Los aztecas instruyeron a todos, sin distinción de género, clase o condición, mientras en otras culturas era un privilegio para ricos y nobles.
Fue un ingeniero eléctrico mexicano, de nombre Guillermo González Camarena, quien a sus 23 años, obtuvo la primer patente para un adaptador de televisión a color, que Estados Unidos luego adoptaría como sistema de transmisión estándar. Fue un químico mexicano nacido en Tepic, Nayarit y de nombre Luis Ernesto Miramontes Cárdenas, quien el 15 de octubre de 1951, teniendo 26 años de edad, sintetizó la noretisterona, compuesto activo base del primer anticonceptivo oral sintético, o sea la píldora anticonceptiva. Fue un mexicano, quien en 1924 inventó la icónica ensalada Cesar que hoy se sirve en muchos sitios y del que podrán leer en la sección de la Red Global Mx.
Los bordados mexicanos no se quedan atrás. Han significado un gran impulso a la industria textil. Son otros de los aportes de las poblaciones indígenas de México a la humanidad, y hablando de creatividad con colores hay que destacar lo que hacen los huicholes de Jalisco, Nayarit, Durango, San Luis Potosí y Zacatecas. Han sabido mezclar las más tradicionales y recientes innovaciones en las artes folklóricas y artesanías de México.
México es sin duda, un país rico por su gran diversidad de especies, plantas y productos que constituyen también parte de nuestra identidad, de ahí que nuestra comida sea de las cosas más conocidas de México.
Los grupos indígenas que residen en el sureste de México han hecho del cacao que cultivan uno de los productos más amados del mundo. Los mexicanos nos enorgullecemos de ese chocolate que le ha dado la vuelta al mundo.
También nuestro aguacate es popular. Sus orígenes se remontan a Coaxcatlan, Puebla, hace unos 10.000 años atrás. Es de los alimentos que produce México para el mundo y hasta de los más buscados en los grandes eventos.
Aun así, nada se compara con la popularidad de la tortilla, cuyo origen en Mesoamérica se remonta a antes del año 500 A.C. en la región de Oaxaca.
Y qué decir del mariachi con sus corridos y rancheras. La música mexicana es rica en géneros y el mariachi es la expresión artística más reconocida en el mundo y que nos ha dado identidad, es un símbolo de alegría que identifica a los mexicanos y que no puede faltar en todo tipo de celebraciones.
¿Qué decir de los cantautores mexicanos de todos los tiempos?. La lista es interminable, pero más de una vez nos han hecho felices y llenado de orgullo las canciones y voces de Pedro Infante, Jorge Negrete, Agustín Lara, Juan Gabriel, José José, José Alfredo Jiménez, Vicente Fernández, Natalia Lafourcade, Julieta Venegas, Lila Downs, Alejandro Fernández, Luis Miguel, Armando Manzanero o Pepe Aguilar o José Antonio Solís, entre muchos otros.
Nos enorgullecen de igual manera los bailadores de huapango, los voladores de Papantla, la Danza de los Parachicos, el Jarabe tapatío, la Danza de los Viejitos, la jarana yucateca y la polka norteña, entre muchos referentes del folklor auténtico mexicano.
México tiene 34 sitios reconocidos como patrimonio de la humanidad, de los cuales 27 son culturales y 6 naturales, además de la gastronomía como patrimonio intangible de la humanidad.
El símbolo más importante de la unidad nacional es la familia pero no solo la presente sino también aquella de nuestros antepasados que se convierten en lo fundamental de nuestras tradiciones, mismas que nos llenan de orgullo y nos dan identidad, tales como las celebraciones por el Día de Muertos y los festejos por la Independencia. De igual manera, la historia prehispánica, colonial; de independencia, revolución y contemporánea, ha forjado al México actual, con sus símbolos de mexicanidad que son de interés del mundo.
Durante mucho tiempo nuestro país ha sido reconocido internacionalmente como un maravilloso destino turístico. La nutrida riqueza cultural y los extravagantes lugares dentro del territorio mexicano nos han ganado esa excelente reputación. Todas las cosas que México ha aportado al mundo merecen ser valoradas en su justa dimensión, tanto en el extranjero como por todos los habitantes del país.
Con una población de casi 130 millones en México y más de 13 millones en otros países, además de 26 millones de personas con raíces mexicanas directas, es obvio que los aportes siguen apareciendo y no son pocos.
Nos topamos con mucha frecuencia con la historia de más de un mexicano destacando en el mundo o con aportes significativos en áreas de conocimiento y desarrollo de la humanidad como por ejemplo en las ciencias puras, nuevas tecnologías, biotecnologías, agrotecnología, investigación aeroespacial, medicina, desarrollo de startups, cine, literatura o industrias creativas.
Y me gustaría agregar en esa lista a quienes luchan cada día por visibilizar que puede haber un mundo mejor para los migrantes en Estados Unidos, empezando por las y los jóvenes que crecieron allá y merecen un status mejor para poder desarrollarse y aportar más.
Nos enorgullece dedicar esta edición de la revista Casa de México a la importancia de México en el mundo, a su riqueza histórica, cultural y gran diversidad. También a las aportaciones de cada mexicano dentro y fuera del país, porque tienen trascendencia en el hoy y en el mañana. ¡Que vivan las y los mexicanos!