Laura Salgado Pérez nació en la Isla de Cedros en Baja California, México. Hace 12 años llegó a Estados Unidos donde comenzó a estudiar de nuevo a los 40 años ya que solo hizo la secundaria en México.
Como muchos connacionales que deciden superarse, cursó el “GED” (General Education Development) en tan solo un mes y siguió con las clases de ESL (inglés como Segunda Lengua). Después decidió estudiar bussines porque en México había tenido negocios.
Laura, platícanos ¿Cómo surge tu idea de negocio?
Cuando estás en el colegio es difícil porque eres inmigrante y tienes que adaptarte al sistema educativo y cultural, te encuentras en una parte en que no eres “ni de aquí ni de allá.
En una clase nació la idea del café de olla, me dejaron una tarea donde tenía que escuchar un podcast que hablaba del café y cuando escuché eso, pensé en la idea “café de olla”, porque es cultura, tradición y una manera de dar a conocer lo que son nuestras raíces, pero lo quise hacer con un método innovador que conservara el mismo sabor.
Encontré un filtro mediante el cual mezclo el café, el piloncillo y la canela, de esta forma lo puedes preparar fácilmente y te permite percibir todos los aromas, además es un producto “eco friendly”. Fue un largo proceso de planeación, 7 meses pensando en el nombre, en los diferentes tipos del café, ya que manejo café colombiano, brasileño, descafeinado y tostado ligero.
¿Eres la primera mujer de tu familia que migra a Estados Unidos?
Soy la primera generación de mi familia que vino a Estados Unidos, la primera mujer que cursó la Universidad, la primera que tiene reconocimientos y negocios, también, lo hice por mis hijos, fue un reto. Cuando llegué pude haber trabajado, pero ese no era mi objetivo, yo quería venir a hacer la diferencia, vine a tomar las oportunidades que te brinda el país. Mi esposo fue de gran ayuda, él me dijo que no trabajara, que me enfocara en estudiar y en lo que quería, ya que eso me abriría la mente.
¿Cómo nace Kafens?
Cuando terminé de estudiar comencé a trabajar un tiempo de contadora, pero no era lo que quería, “no era lo mío”, me dije; “tengo que concentrarme en mi negocio y sacar adelante lo del café de olla”.
Primero lo llamé “coffe”, luego pensé en algo más tradicional y que además pudiera registrar como mi marca, así nació “kafens”, la palabra viene del término “kafen” que significa café en náhuatl, posteriormente el nombre que le puse a cada café, son los nombres de las pirámides de México
- ITZÁ de la pirámide de Chichén Itzá, para el café descafeinado.
- NOHOCH es la pirámide más grande, para el café original mexicano.
- KINICH es la pirámide del sol, para el café tostado ligero, pues el grano es amarillo.
- COBÁ es una pirámide que tiene mucha relación con Colombia, para el café colombiano.
Tuve que estudiar esta parte histórica para introducir nuestra cultura en otras culturas. Nosotros siempre hablamos de el “té verde”, el “matcha”, “chai”, que provienen de la India, Tailandia, China, Japón, etc. y dije; “porque no dar a conocer nuestros sabores y tradiciones, será algo diferente, pero a la vez mantendrá la tradición en el sabor”.
Posteriormente, acudí al Consulado de México en San José a renovar mi pasaporte y me encontré con el programa “Mexicana Emprende”, fui corriendo a aplicar, hablé, hice mi carta y la envié. Ahí inició mi viaje como emprendedora en Mexicana Emprende, tome el curso, había términos de contabilidad que ya había visto, pero que aprendí en inglés, entonces, los tuve que aprender en español, cuando finalicé la clase hice mi presentación y gané el primer lugar. Así fue como el Consulado me siguió invitando a eventos para dar a conocer Kafens, otra ventaja fueron los premios que me dieron; los websites gratis, patrocinios, coach de bussines, marketing, todo esto me abrió las puertas para dar a conocer mi marca.
Más tarde, salió otra convocatoria para cuatro generaciones de Mexicana Emprende, éramos 15 participantes, el premio esta vez era dinero, me invitaron a participar y nuevamente gané.
¿Cómo dirías que influyó en ti el programa de Mexicana Emprende?
Mexicana Emprende me abrió puertas que no me atrevía a tocar, aprendí términos y estructura de los negocios en español y como emprendedora aprendí a ayudar a otras mujeres y generar vínculos. El programa me continúa apoyando, sigo obteniendo el beneficio de que me inviten a los eventos del consulado o inauguraciones donde cuento mi experiencia.
¿Cuál es el propósito de Kafens?
Crear empleos a mexicanas en California, ya que la mayoría del trabajo se relaciona a lo agrícola. El objetivo es que Kafens brinde trabajo a las mujeres que están embarazadas, así no tendrían que estar bajo el sol o relacionadas con los químicos, además, podrían seguir llevando sustento a su familia. Incluso a futuro quiero iniciar un programa donde ellas puedan aprender habilidades para que también emprendan, así no todo el tiempo estarían trabajando. A veces se necesitamos que una mujer te “empuje”.
¿Qué consejo les darías a las mujeres que están comenzando a emprender?
Puede ser un sueño, pero es un sueño que debes hacer realidad, tienes que luchar y no dejarlo, a veces te enfrentas con obstáculos y prefieres trabajar en otro lado, pero si te esfuerzas un poco más puedes cumplirlo, y que tomen las herramientas que brinda el consulado, ya que te enseñan paso a paso cómo seguir tu emprendimiento.
¿Cuáles han sido tus mayores desafíos como emprendedora?
Primero ser migrante, pero cuando te acercas con las personas correctas te ayuda mucho a salir adelante. Kafens ha sido tantas pruebas, tantas inversiones, tiempo y buscar el tipo de mercado al que quiero llegar”
¿En tu experiencia como emprendedora que consideras más valioso?
Dar a conocer mi cultura, mis tradiciones, el sabor, un poco de lo que es México, el que prueben y sepan la diferencia de otros sabores mexicanos aquí en Estados Unidos, dar a conocer que el café de olla es historia, es poder hablar de su nacimiento durante la revolución mexicana, de cómo lo preparaban las esposas, para cuando los esposos tenían que partir.
¿Qué sigue para Kafens, que esperas más adelante?
Sigo innovando y creando diferentes formas de empaques, como sobres y tarros, la combinación de lo tradicional. Quiero que Kafens sea reconocido, espero que trascienda no solamente en Estados Unidos, sino en países como España, Francia, Bélgica, India y China, que sepan lo que son nuestras tradiciones, nuestro sabor.
¿Recomendarías a las personas que nos leen el programa Mexicana Emprende?
¡Absolutamente! A todas siempre les hablo del programa, les digo: “empiecen, apóyense con el consulado, porque tienen otros programas, no importa que no ganes, lo importante es participar y tomar las oportunidades, hay mentorías, invitaciones a eventos donde das a conocer tu producto”. Muchas mexicanas que tienen un negocio no saben, yo refiero a otras mujeres de San José. Es una oportunidad única, haber terminado me dio el poder de estar aquí.
Gracias Laura Salgado Pérez por tu talento y fuerza.
Una gran mexicana empoderada, exitosa y perseverante.
¡De Isla de Cedros, Baja California para el mundo!
Si quieres probar el delicioso café de olla Kafens te invitamos a descubrirlo en la página web: