DIPLOMACIA CERCANA A LA GENTE

La Canciller Alicia Bárcena inauguró con energía una nueva etapa en la Cancillería mexicana destacando la vocación de servicio que debe prevalecer entre quienes laboramos para defender los intereses de nuestro país y de nuestra población allende nuestras fronteras.

Reiteró con claridad la hoja de ruta para quienes trabajamos en la Institución, señalando que la diplomacia mexicana debe ser cercana a la gente, es decir que debe tener la clara intencionalidad de escuchar las necesidades y demandas de las y los mexicanos en el extranjero.

¿Cómo traducimos desde el Instituto de los Mexicanos en el Exterior dicha intencionalidad en acciones concretas? El IME desde hace más de tres décadas ha ideado mecanismos para acercarse y escuchar la voz de nuestros connacionales. Hoy, con la profunda convicción de que los requerimientos de nuestra diáspora deben ser la base para el diseño e instrumentación de las acciones, programas e iniciativas, valoramos las oportunidades que nos permiten acercarnos a nuestros migrantes y a sus hijos e hijas.

Para escuchar a los connacionales nuestros cónsules visitaron desde los años noventa estadios de futbol, iglesias y lugares en donde realizaban reuniones cívicas, entre otros espacios; hoy la tarea de acercamiento ha crecido y es contundente. La más grande red de consulados en el mundo localizada en Estados Unidos, así como nuestras representaciones diplomáticas y consulares alrededor del orbe, convocan de manera frecuente a encuentros comunitarios en todos los continentes del planeta. 

Del diálogo directo con los usuarios y operadores de nuestras ventanillas comunitarias, de la experiencia acumulada por nuestros funcionarios y los miembros del servicio exterior mexicano, además de la voz de académicos y expertos, nos enriquecemos para repensar las mejores maneras de servir a nuestra gente.

Las iniciativas comunitarias que apoya la Cancillería a través del IME, derivan de la diplomacia cercana: tan solo en este año que concluyó tuvimos la oportunidad de apoyar el crecimiento de nuestras mujeres participantes en el Programa Consular de Emprendimiento para Mexicanas en el Exterior, de escuchar las soluciones planteadas en el Encuentro de Mujeres Mexicanas en Europa; atendimos con interés las ideas de nuestras comunidades LGTBQ en San Francisco, así como los señalamientos de los adultos que aprenden a leer en nuestras plazas comunitarias; escuchamos también a nuestras comunidades indígenas con quienes compartimos el foro en San José, California; celebramos a los estudiantes que llegan a las universidades gracias al Programa IME Becas. 

También escuchamos a las madres de familia que desean que sus hijos hablen español y conozcan más de su país de origen; Nos enorgullecemos de las y los chicos que participaron en el Programa de Inmersión Cultural y Voluntariado al ver cómo redescubrieron sus raíces, hemos reaccionado ante los anhelos y convicciones de nuestros DREAMERS y aprendimos de las novedosas iniciativas planteadas por las cineastas en la Jornada de Artistas y por los integrantes de la Red Global Mx. Estas, entre otras muchas oportunidades de interlocución y cercanía con nuestra diáspora son relevantes porque nos permiten aprender y repensar nuestras acciones diarias para servirles mejor.

La hoja de ruta marcada por la Canciller es categórica y nos motiva en 2024 a seguir avanzando de la mano de nuestra población migrante y sus descendientes.

A ustedes nos debemos y les agradecemos el entusiasmo, la energía y la visión que mantienen para seguir mejorando y contribuyendo a su país de residencia, poniendo siempre el nombre de México en alto.