Tan solo desde el 1 de septiembre de 2022 a junio de 2023 las Ventanillas de Salud de los Consulados mexicanos han atendido a más de 1,017,450 personas migrantes y han brindado 5.4 millones de servicios preventivos y de promoción de la salud, entre ellos aplicación de vacunas, tamizajes en salud general e incluso mental, así como orientaciones para el autocuidado y sobre cómo navegar en el sistema de salud de Estados Unidos para recibir una atención adecuada sin importar la situación migratoria de la persona.
Así, las Ventanillas de Salud se han convertido en el hogar médico de México en el exterior y evidencian que nuestra comunidad no está sola y cuenta con el apoyo de su país natal.
Y este resultado que podemos presumir hoy es la mejor forma de celebrar los 20 años de la creación de las Ventanillas de Salud, las cuales funcionan en un ambiente seguro, confiable y de manera gratuita.
Lo comentábamos hace unos días durante la Reunión Anual de las Ventanillas de Salud con representantes de 147 agencias que colaboran con el gobierno de México y sus instancias como la Secretaría de Relaciones Exteriores y el Instituto de los Mexicanos en el Exterior, y la Secretaría de Salud: la estrategia de estos 20 años ha funcionado y queremos hacer más.
Basadas en los requerimientos locales, las Ventanillas han permitido poner en el centro de atención las necesidades crecientes de una comunidad con retos importantes tanto en el acceso a los servicios de salud como a la prevención de enfermedades. Y funcionó muy bien durante la pandemia de COVID-19, cuando se garantizaron vacunas para todas las personas migrantes, que por ser trabajadores esenciales – en gran parte – se convirtieron en una población especialmente vulnerable.
Esa vez y tantas otras, las palmas se las llevaron las operadoras y los consulados, donde se construyen programas vitales para nuestra comunidad mexicana pues se tiene el compromiso de atender de manera efectiva e integral a todos, protegiéndolos y garantizando su bienestar.
Las Ventanillas de Salud priorizan el diagnóstico temprano de las enfermedades y toman en cuenta los determinantes sociales de la salud que afectan a nuestros connacionales. Y es que somos conscientes de que la educación y la concientización son herramientas clave para prevenir el desarrollo de los problemas de salud mental y las adicciones. En ese sentido, promovemos la creación de entornos saludables y de apoyo, tanto en el ámbito familiar como en el comunitario.
Para el Instituto de los Mexicanos en el Exterior (IME) el tema es de primer orden y lo hemos demostrado en el quehacer diario. Estamos conscientes de que el acceso a los servicios primarios y preventivos de salud se debe facilitar sin importar origen, edad, sexo, lugar de residencia o estatus migratorio. Lo ha dicho en más de una ocasión el Presidente Andrés Manuel López Obrador, quien ha puesto gran empeño en garantizar servicios de salud de calidad, aumentar la cobertura en seguros públicos y promover una cultura de prevención para toda la población, incluyendo a los millones de mexicanos que residen en Estados Unidos o quienes opten por retornar al país.
Sabemos que falta mucho, que el reto que nos dejan estos primeros 20 años de las Ventanillas de Salud es mirar hacia el futuro y contar con más servicios, acciones, mecanismos y alianzas en materia de salud para los próximos 20.
Debemos ser capaces de crecer al ritmo de nuestra comunidad mexicana que radica en el exterior para que todas las niñas, niños, adolescentes, personas de la comunidad LGBTQ, indígenas, adultas y adultos mayores, así como mujeres y hombres cuenten con servicios de salud y salud mental adecuados y de calidad.
Desde el IME seguiremos trabajando por alcanzar ese objetivo, recordando que la salud de un país es también la salud de sus migrantes.