Por David Kelvin Santos, fundador de la vela muxe Guuchachi.
@DKelvinsantos
Cuando se migra la nostalgia por nuestras raíces es inmensa, ese sentimiento de soledad hace que uno busque en los recuerdos mas escondidos, en las personas con las que se comparten lenguajes comunes, historias o experiencias, lejos de la tierra en la que se creció, el corazón se acelera al escuchar la música, o alguna voz que nos recuerda a algún ser querido o ver en cualquier pantalla una imagen que nos remite a nuestras tierras de origen, se busca el sentido de pertenencia.
Al migrar se carga también con los elementos que nos dieron identidad, en mi caso la muxeidad hoy tan traída, llevada, migrada, esa a la que muchos se negaron a reconocer (incluyendo a otras personas de los grupos LGBTTTIQ+, que se referían a las personas muxe’ como indígenas trans).
Esa que nuestras culturas istmeñas nos enseñaron para denominar a quienes no somos ni hombres, ni mujeres, esa que el machismo usa para avergonzar, someter, porque aun en nuestras culturas la influencia occidental nos enseñó que se debe castigar a quien traicionan el ejercicio de machismo dominante, esa muxeidad que se percibe en muchos lugares y se visibiliza con la imagen solo de aquellas personas que trascendieron el género, esa que muchos consideran que es equivalente a ser trans (Muxe Guna), desconociendo las otras expresiones de la muxeidad, esas expresiones que no son tan taquilleras o visibles en el mundo occidental, es decir las personas muxe que se visten de hombre afeminados o varoniles pero no usan vestimenta de mujer, esos muxe (Muxe Nguiu) que también somos parte de la muxeidad
Vivir la muxeidad no es están sencillo cuando hablamos de ámbitos fuera de la región del istmo de Oaxaca, por la doble y a veces triple carga discriminatoria que conlleva, ser indígena y tener una preferencia sexual no heterosexual, en esta circunstancia para quienes amamos nuestras raíces es importante generar los espacios y formas de relacionarnos, como la Velas Muxe’, en mi caso la Vela Muxe’ Guchachi’ (cumpliremos 10 años de realizarla en al Ciudad de México) donde además de generar el espacio adecuado para vivir, fortalecer y rescatar nuestra cultura en un ambiente festivo, también aportamos la visibilidad de nosotros los Muxe Nguiu (muxes que no usamos vestimenta de mujer), desmitificando que la muxeidad solo se refiere a nuestras valientes hermanas que trascienden el genero
Estos años de visibilidad me han dejado un fortalecimiento profundo de mis raíces, mi cultura y mi muxeidad, de la cual estoy orgullo de contribuir en la construcción y visibilidad, enfrentando la discriminación de aquellas personas que consideran que tener origen indígena es motivo de inferioridad o vergüenza, desde las trincheras en las que la vida me ha puesto, me ha tocado mostrar que las personas muxe somos de mucho trabajo, compromiso social y familiar, somos comerciantes, artistas del textil, la gastronomía, cerámica, fotografía y arte gráfico, entre otras expresiones.
Kelvin fue el conferencista invitado en el 3er. Encuentro de Comunidades Mexicanas LGBTQ+ en el Exterior con el tema: La expresión Muxe y su relación con la cultura LGBTQ+ en México.
Además fue parte del contingente mexicano organizado por el IME y el Consulado de México en el Pride Parade de San Francisco.
