Ricardo Villarreal,
Vicepresidente de la Red Global MX Capítulo Portugal
@rcardvillarreal
Dentro de las historias más inspiradoras en el emprendimiento, aquellas que nacen en momentos de crisis son admirables por la resiliencia y el liderazgo de sus creadores, y su determinación por ofrecer algo innovador y de gran valor.
Tal es el caso de Sancho Pancho, una empresa con causa sustentable que se dedica a la producción de snacks y premios para perros a partir de la reutilización del desperdicio de alimentos, creando conciencia sobre el consumo responsable y ayudando al planeta al reducir el desperdicio. Sancho Pancho se inauguró el pasado 24 de septiembre con una tienda física en Lisboa, Portugal.
Sus dueños son la pareja conformada por Daria Demidenko y Rafael Mejía, originario de Colima y miembro de la Red Global MX Capítulo Portugal. Ellos iniciaron con la idea de este proyecto durante los inicios de la pandemia por Covid-19 en marzo del 2020. En ese entonces, ellos viajaron a Rusia de vacaciones (de donde es originaria Daria), pero en lugar de quedarse por 15 días, como planearon originalmente, extendieron su estancia a cuatro meses debido a la pandemia.
Daria trabajó en restaurantes en la industria hotelera, pero el lugar donde trabajaba cerró y con ello se abrió una ventana de oportunidad para emprender. Desde un principio ellos decidieron que el negocio a iniciar estaría relacionado a los perros, pero al comienzo no sabían de qué se trataría.
El Inicio de Sancho Pancho
Con ocho años residiendo en Portugal y profesionista en el área de tecnologías de información, Rafael nos cuenta que muy pronto les llegó la idea gracias a un amigo que era dueño de un sushi bar. Debido a la pandemia, tuvo bajas ventas y se le quedaba mucho pescado fresco. Se preguntaron si podían aprovecharlo y darle una segunda oportunidad a ese pescado en lugar de que fuera a la basura.
Entonces llevaron a cabo la idea de reutilizarlo de forma natural. “El producto está limpio y en buena calidad, así que desarrollamos la idea de darle una segunda oportunidad para elaborar snacks para perros.” Y así fue como comenzó la historia de su empresa Sancho Pancho.
Sobre el nombre, nos dice Rafael que se trata de un juego de palabras que surgió porque el nombre de su perro es Pancho y les gustó la combinación Sancho Pancho, aunque es inevitable hacer alusión al célebre personaje escudero de Don Quijote.
Poco a poco fueron contactando a otras pescaderías y fruterías y se dieron cuenta de la gran cantidad de alimento en buen estado que se desperdicia y que puede aprovecharse. “Empezamos a investigar cómo sacar el mejor provecho a los alimentos que recuperamos. Comenzamos con una prensa manual para sacar el aceite de salmón, a producir galletitas al mezclar con harina, después a entender el proceso de deshidratación y el tema de caducidad. Y claro, la idea es crecer más para poder responder a la cantidad de desperdicio que se genera en Lisboa.”
Para Rafael y Daria, emprender como pareja en este negocio ha sido un camino de continuo aprendizaje y unión, donde el valor de su causa es pilar de su motivación, ya que para ellos es muy importante vivir de manera más consciente y sustentable. Además de mantener una sólida relación con sus clientes y proveedores, Sancho Pancho tiene seguidores en las redes sociales que se han inspirado en su modelo sustentable para crear snacks naturales en casa.
Emprender en Portugal y la conciencia por los animales
Rafael reconoce también la gran ventaja de estar en Portugal para su negocio, no solo porque es un país con muy buen clima y seguro para vivir, sino porque es una puerta de entrada a Europa que da acceso al gran mercado que es la Unión Europea. “Eso te da muchas oportunidades, incluso para los envíos, ya que no cuesta mucho más enviar a otros países europeos que a algunos destinos dentro de Portugal.”
Por otro lado, Rafael y Daria comparten que el tener perros los ha hecho más empáticos con todos los animales. Para ellos sus perros son parte de su familia y desde que los tienen han sentido una conexión más profunda y de amor con estos seres sintientes, lo que les ha permitido expandir su compasión hacia los demás animales y también evitar comerlos.
Con ello en mente, y para quienes nunca han tenido mascotas y quisieran ser dueños de una, Rafael y Daria recomiendan pensar en el motivo por el cual se quiere tener una mascota y evitar regalar o imponer un perro. “De inicio, lo ideal es pedir un perro prestado por una semana para darse cuenta de los cuidados que requieren y saber si tienes la capacidad y responsabilidad para tenerlo. Si no puedes dedicarle el tiempo y la atención que se merece, lo mejor es no tenerlo.”
Sobre el futuro para Sancho Pancho y los productos que tendrán en expansión, Rafael dice que, “la variedad depende de nuestra imaginación.” A pesar de que llevan poco con el negocio, su objetivo es seguir creciendo e innovando hasta ser una tienda zero waste. Adicionalmente, quieren seguir asociándose a marcas y empresas con causa que compartan la misma idea de la sustentabilidad y del consumo responsable, y crear una comunidad para que más personas, incluyendo clientes, se unan a esta filosofía.
¿Y qué dicen sus clientes? Ellos están encantados con sus productos porque son naturales, no tienen conservadores y no causan alergias ni provocan problemas de digestión en sus mascotas. Además, como tienen un sabor natural, a los perros les gusta más que el sabor de las croquetas.
La tienda Sancho Pancho se encuentra físicamente en el área de Lapa en Lisboa, muy cerca del parque Jardim da Estrela. Pero también se pueden hacer pedidos desde su página web en sanchopancho.shop y a través de su cuenta de Instagram.